SANTA CECILIA
Virgen y mártir
Doble
(ornamentos encarnados)
Mira que vengo pronto: mantén lo que tienes,
no sea que otro se lleve la corona.
(Apocalipsis 3, 11)
Epístola
Tú ensalzaste mi casa sobre la tierra, y yo te supliqué que me librases de la muerte, que todo lo disuelve. Invoqué al Señor, Padre de mi Señor, que no me desamparase en el tiempo de mi tribulación, y mientras dominaren los soberbios. Alabaré sin cesar tu nombre, y le celebraré con acciones de gracias; pues fue oída mi oración. Me libraste de la perdición, y me sacaste a salvo en el tiempo calamitoso. Por tanto, te glorificaré, te cantaré alabanzas, y bendeciré el nombre del Señor.
Eclesiástico LI, 13-17
Evangelio
En aquel tiempo: Dijo Jesús a sus discípulos: “El reino de los cielos será semejante a diez vírgenes, que tomaron sus lámparas y salieron al encuentro del esposo. Cinco de entre ellas eran necias, y cinco prudentes. Las necias, al tomar sus lámparas, no tomaron aceite consigo, mientras que las prudentes tomaron aceite en sus frascos, además de sus lámparas. Como el esposo tardaba, todas sintieron sueño y se durmieron. Mas a medianoche se oyó un grito: ‘¡He aquí al esposo! ¡Salid a su encuentro!’. Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas. Mas las necias dijeron a las prudentes: ‘Dadnos de vuestro aceite, porque nuestras lámparas se apagan’. Replicaron las prudentes y dijeron: ‘No sea que no alcance para nosotras y para vosotras; id más bien a los vendedores y comprad para vosotras’. Mientras ellas iban a comprar, llegó el esposo; y las que estaban prontas, entraron con él a las bodas, y se cerró la puerta. Después llegaron las otras vírgenes y dijeron: ‘¡Señor, señor, ábrenos!’. Pero él respondió y dijo: ‘En verdad, os digo, no os conozco’. Velad, pues, porque no sabéis ni el día ni la hora”.
Mateo XXV, 1-13
Visto en: Santo Evangelio del Día (https://santoevangeliodia.blogspot.com/)