SAN ALEJO
Confesor
Semidoble
(ornamentos blancos)
Quienquiera haya dejado casa o hermanos, o hermanas,
o padre, o madre, o esposa, o hijos, o heredades, por causa
de mi nombre, recibirá el ciento por uno y poseerá la vida eterna.
(Mateo 19, 29)
Epístola
En verdad, grande negocio es la piedad si uno se contenta con lo que tiene. Porque nada trajimos al mundo, ni tampoco podemos llevarnos cosa alguna de él. Teniendo pues qué comer y con qué cubrirnos, estemos contentos con esto. Porque los que quieren ser ricos caen en la tentación y en el lazo (del diablo) y en muchas codicias necias y perniciosas, que precipitan a los hombres en ruina y perdición. Pues raíz de todos los males es el amor al dinero; por desearlo, algunos se desviaron de la fe y se torturaron ellos mismos con muchos dolores. Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y anda tras la justicia, la piedad, la fe, la caridad, la paciencia, la mansedumbre. Lucha la buena lucha de la fe; echa mano de la vida eterna, para la cual fuiste llamado, y de la cual hiciste aquella bella confesión delante de muchos testigos.
I Timoteo VI, 6.12
Evangelio
En aquel tiempo: Dijo Pedro a Jesús: “Tú lo ves, nosotros hemos dejado todo, y te hemos seguido; ¿qué nos espera?”. Jesús les dijo: “En verdad, os digo, vosotros que me habéis seguido, en la regeneración, cuando el Hijo del hombre se siente sobre su trono glorioso, os sentaréis, vosotros también, sobre doce tronos, y juzgaréis a las doce tribus de Israel. Y todo el que dejare casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o mujer, o hijos, o campos por causa de mi nombre, recibirá el céntuplo y heredará la vida eterna”.
Mateo XIX, 27-29
Visto en: Santo Evangelio del Día (https://santoevangeliodia.blogspot.com/)