Martirologio romano
En Vilna de Lituania, san Casimiro, confesor, hijo del rey Casimiro, al cual el sumo pontífice León X puso en el número de los santos.
En Roma, en la vía Apia, el triunfo de san Lucio I, papa y mártir; el cual, primeramente en la persecución de Valeriano fue condenado al destierro por la fe de Cristo; mas vuelto por disposición divina a su iglesia, finalmente, después de haber trabajado muchísimo contra los novacianos, consumó el martirio, siendo decapitado. San Cipriano le celebra con grandísimas alabanzas.
En Nicomedia, san Adrián, mártir, con otros veintitrés; todos ellos, por orden del emperador Diocleciano, quebradas las piernas, consumaron el martirio. Sus reliquias fueron llevadas por los cristianos y sepultadas con grande honor en Bizancio, de donde más tarde el cuerpo de san Adrián fue trasladado a Roma el 8 de septiembre, día en que se celebra su fiesta principal.
En Roma, en la vía Apia, novecientos santos mártires, que fueron sepultados en el cementerio de santa Cecilia.
En el Quersoneso, el martirio de los santos obispos Basilio, Eugenio, Agatodoro, Elpidio, Eterio, Capitón, Efrén, Néstor y Arcadio.
En el mismo día, san Cayo Palatino, a quien sumergieron en el mar, y otros veintisiete.
Asimismo, el suplicio de los santos Arquelao, Cirilo y Focio.
Y en otras partes, otros muchos santos Mártires y Confesores, y santas Vírgenes.
R. Alabado y glorificado sea Dios eternamente.
Tomado de Cristo ¿Vuelve o no Vuelve? (https://vuelvecristo.blogspot.com/) y de Año Cristiano de Juan Croisset, S.J.