SANTIAGO EL MAYOR
Apóstol y mártir
Doble de primera clase
(ornamentos encarnados)
La paz os dejo, mi paz os doy:
no os la doy Yo como la da el mundo.
No se turbe vuestro corazón, ni tema.
(Juan 14, 27)
Epístola
Hermanos: Creo que Dios, a nosotros los apóstoles, nos exhibió como los últimos (de todos), como destinados a muerte; porque hemos venido a ser espectáculo para el mundo, para los ángeles y para los hombres. Nosotros somos insensatos por Cristo, mas vosotros, sabios en Cristo; nosotros débiles, vosotros fuertes; vosotros gloriosos, nosotros despreciados. Hasta la hora presente sufrimos hambre y sed, andamos desnudos, y somos abofeteados, y no tenemos domicilio. Nos afanamos trabajando con nuestras manos; afrentados, bendecimos; perseguidos, sufrimos; infamados, rogamos; hemos venido a ser como la basura del mundo, y el desecho de todos, hasta el día de hoy. No escribo estas líneas para avergonzaros, sino que os amonesto como a hijos míos queridos. Pues, aunque tuvierais diez mil pedagogos en Cristo, no tenéis muchos padres; porque en Cristo Jesús os engendré yo por medio del Evangelio.
I Corintios IV, 9-15
Evangelio
En aquel tiempo: La madre de los hijos de Zebedeo se acercó a Jesús con sus hijos, y prosternose como para hacerle una petición. Él le preguntó: “¿Qué deseas?”. Contestole ella: “Ordena que estos dos hijos míos se sienten, el uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, en tu reino”. Mas Jesús repuso diciendo: “No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber el cáliz, que Yo he de beber?”. Dijéronle: “Podemos”. Él les dijo: “Mi cáliz, sí, lo beberéis; pero el sentaros a mi derecha o a mi izquierda, no es cosa mía el darlo, sino para quienes estuviere preparado por mi Padre”.
Mateo XX, 20-23
Visto en: Santo Evangelio del Día (https://santoevangeliodia.blogspot.com/)